domingo, 15 de junio de 2014

Día 09 - Santa Fe (NM)

Hoy ha sido un día tranquilito, no ha sido de desplazamiento, hoy tocaba descansar un poco, reordenar las maletas, hacer la colada (bueno esta la hicimos ayer por la tarde) y prepararse para la segunda semana de viaje. Mañana además es un poco especial porque cambiamos el modo de viajar; bajaremos a Alburquerque en coche y allí yo tomaré la moto y Jose seguirá con el coche.

Pero claro, un día tranquilito aquí, no es lo mismo que en Madrid o Sevilla, siempre te sorprende algo...

Empezaba Jose un poco alucinado al ver cómo la música con la que se nos amenizaba el desayuno era la sevillana "Me casé con un enano, salerito, pa jartarme de reir". Obviamente mi cultura musical no da para tanto pero a Jose no se le escapa una.

Nos alojamos, por cierto, en el mismo hotel que estuve el año pasado que me gustó mucho y está muy bien con el pequeño (o gran handicap) de que el wi-fi "guai fai" (como dicen aquí)  no funciona muy bien y ayer me costó un montón terminar el blog. Hoy parece que va un poco mejor la cosa.

Por cierto, estos pequeños detalles se escapan pero lo de escribir el blog tiene su misterio. Un día lo hice sentado en la escalera de  entrada de la oficina del motel (en la calle, vamos) porque en nuestra habitación no "furulaba". Aunque, es verdad que el indio que regentaba el motel se esforzó (o parecía que se esforzó) por solucionarlo, no lo consiguió. Otro día en el restaurante donde cenamos porque en el hotel directamente no había (en Meramec Caverns) y ayer sentado en la puerta de la lavandería del motel pues era donde parecía que la señal era mejor... Hoy estoy cómodamente sentado delante de nuestra habitación en una sillita muy apañada.

Decía que aquí un día normal no es como en España y es que después de desayunar nos hemos ido al centro histórico de Santa Fe. Hemos paseado un poquito y hemos visitado la catedral de San Francisco de Asis. Estaban en ese momento celebrando un bautismo y nos ha llamado la atención así que nos hemos sentado muy discretamente y asistido al bautismo en sí mismo (por cierto aquí, introducen directamente al niño, en este caso niña en la pila bautismal. Dolores, por cierto, se llama la niña). El caso es que después de la inmersión, la catedral, abarrotada, por cierto, rompe en aplausos y después todos se ponen a cantar. Os juro que han cantado entero "Estas son las mañanitas que cantaba el Rey David..." en español, claro. Al poco de eso han empezado con la colecta (muy organizada y sistemática, momento en el que con mucha discreción y sigilo hemos abandonado tan solemne acto).



Hemos seguido callejeando por la ciudad, realizado algunas compras y después nos hemos sentado en una terracita muy apañada a comer.





El blog impide contar infinidad de cosas que nos sorprenden día a día, tenemos algunas de tipos "raros" que quedarán en nuestras colecciones privadas pero no me resisto a poner este "robado". Me crucé con él en varias ocasiones durante el día, no tenía un aspecto muy amigable así que no quise pedirle el hacerle una foto pero con disimulo y discreción conseguí hacer una. No puedo ahora editarla y, por tanto, el motivo de la misma no está "centrada" y no digo qué es lo sorprendente; creo que se verá bien en la foto (aunque hay que fijarse un poco). Juro que se tiró así toda la mañana....


Seguimos con nuestro paseo...




Como decía nos fuimos después a comer y el caso es que cuando ya estábamos terminando se ha empezado a ver en la calle en la que estábamos un cierto movimiento de fuerzas públicas. Que si un policía cortando la calle por un lado, que si un coche de bomberos por aquí, que si una ambulancia por allí, que si dos tipos trajeados con pinganillo murmurando...



Yo la verdad, tengo la sensación de que los americanos son un poco exagerados para estas cosas y no he dado mucha importancia al asunto así que hemos seguido a lo nuestro. Al rato, ha venido un agente diciendo que si éramos tan amables pasáramos dentro del local porque había un paquete sospechoso en las cercanías y estaban un poquito moscas... Pues nada, para dentro que nos vamos. Como ya hemos acabado de comer nos pedimos un cafecito y seguimos a lo nuestro. Al rato ya directamente ha venido otro ha gente y ha desalojado el local, todos a la calle y en la dirección que nos indicaba.. Pues nada, nos vamos. Nos hemos quedado un poco por la zona curioseando hasta que ha llegado el camión de los Bomb Squad (los Tedax, vamos) momento en el que ya hemos decidido venirnos al hotel a descansar un poco.



No hemos tenido confirmación de que nada haya pasado, desde luego como espero y deseo.

Tras una siesta, en mi caso, muy considerable hemos ido a visitar un pueblecito próximo del que sólo sabíamos dos cosas, que se llama Madrid y que en él se rodó Wild Hogs, película que nos sirvió de inspiración en nuestro viaje del año pasado. Sin mucha esperanza de ver nada especial hemos encontrado un pueblecito con muchos negocios tipo hippie, mucho motero "malote", mucha gente "bohemia" por decirlo de algún modo, aunque en general, se veía francamente decadente.






Nos ha llamado la atención una terracita en que había un grupo tocando en directo y aunque al principio hemos descartado la carta de comida pues sólo queríamos una cerveza, tras una segunda nos hemos animado a merendo-cenar y acabado compartiendo una hamburguesa de búfalo espectacular.



O sea que sin ninguna pretensión nos hemos encontrado disfrutando enormemente una hamburguesa de búfalo (otra de mis espinitas del año pasado) con buena cerveza en una terraza con un grupo tocando en directo, vaya que lo hemos pasado muy bien.



Sólo un detalle, si alguien que esté leyendo el blog tiene intención de ir, que no olvide llevarse algo para los mosquitos o moscas o lo que sea que hubiera allí: comían...

Luego vuelta al hotel a escribir el blog y reunir fuerzas para mañana...

1 comentario:

  1. Amigo que bárbaro, es envidiable todo lo que estan conociendo, y sobre todo que antojo con esa hamburguesa, la probaremos, y gracias por el tip de los mosquitos, iremos preparados.

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